Este invierno golpea, aunque no sea tan crudo, tan frígido como para tiritar, aunque no hay heladas, escarcha de nieve, ni lluvias torrenciales, ni los vientos golpeen con tanta furia que congele el aliento. Pero este invierno es mucho más mortal si entre su transcurso caemos en las profundidades de Vertumno; una material que remesera los interiores, las almas, las animas, un material que se siente tan desesperado al punto de volver la calma un estado casi imposible de hallar; un material que regordea el lado más perceptible del ser, aquel que guarda las memorias bellas que se puedan exaltar como también sucesos con los cuales se lucha en pos de eliminar las decepciones y fracasos, o simplemente aquellos minutos que por alguna razón se quedan grabados en la memoria y son bastiones que llevan a la experimentación de diversos sentimientos.
Este invierno me recuerda los nevados transandinos, este invierno llego con un majestuoso e impresionante material, gracias a Estaciones. Material fácil de interiorizar y tomarlo como propio, composiciones que te enfrían, pero no para dejarlo pasar así por así, mas por el contrario es un frio que te despierta, que hace pisar tierra y ser consciente de nuestra humanidad, la dependencia de los sentimientos, el ejercicio frecuente de amar y odiar, anhelar y despreciar, olvidar y extrañar, un juego constante.
Esta primera entrega consta de 11 canciones. Mientras el celeste del cielo es irrumpido por la reunión de nubes grises, el intro titulado “Vástagos”, hace lo suyo, teñir el ambiente de melodías instrumentales que concurren ansiosos y dispuestos a transformar el terreno firme en un tambaleante soporte para nuestros corazones. Como si la inmolación –a manos de toda la carga emocional- pudiera evitarse se presenta con toda su escudería “Arboles” a viva voz, a puro golpe que retumba, que descarga energía, como si se tratase de un desfibrilador, con acordes elásticos que evitan el abatimiento del psique. Por su lado “Petrichor” con sus cuerdas, y toda la intensidad, aun muestra un poco de aquel celeste que todavía permanece en pie de lucha, debilitado pero resuelto a no dejarse vencer por las nubes grises.
Pero al frente se topa con “Hojas”, tremendísima canción, que venía amoblando el mirador donde perspicazmente observa toda esa carga emotiva, lista para disfrutar con las melodías, liricas y esa voz que franquea cualquier anticuerpo que preserva la cordura. Sin duda este tercer tema, casualmente cronometrado con sus tres antecesores, es la cúspide de este álbum, y eso a pesar de que fue uno de sus primeros singles. El ambiente que erigen sus notas podrían expandir el reino de los polos o la de los nevados que rosan con el cielo, es más mil soles no podrían contra todo su poderío, contra todo su caudal, que podría sumergir todo nuestro universo aunque nuestros días no presenten lluvias.
Casualmente la siguiente es titulada “Precipitaciones” y con su sonidos suave mese lentamente el cauce que fluye entre todas las remembranzas, una cuerda limpia y acordes prudentes, suenan mientras la inmovilidad parece raptar todo movimiento, mientras tanto aquellas nubes grises danzan a su ritmo y las gotas de lluvia parecen haber ganado más tamaño. El frio del invierno se cuela por donde sea. Podríamos caer en lamentaciones y la marcha fúnebre recaería en esta pista.
Con “Pétalos” se inicia una pequeña marcha de imágenes mientras la potente voz característica de esta agrupación no declina. El temporal, siempre ausente en versión física, tiende su reino en las mentes, inunda, hiela, remese, congoja todo ser, toda visión que esquiva aquello que doblega y causa algún derramamiento de lágrimas, como para hacer más dramático este efecto se constituye un repique en la batería, seguido por un peculiar inicio, el cual pertenece a “Equinoccio”, presentando una voz ahogada que con el transcurso se descubre y apoya a sus demás acompañantes, cuerdas y golpes de batería. Al parecer entre manos se traen cristalizar cada añoranza, cada nostalgia…..
Y si en este punto hace falta un analgésico aparece “Querido Am”, corto pero algo turbador, siembra la incógnita de que si esa dosis escuchada tiene un mismo matiz o si lo siguiente seguirá el mismo rumbo. Al parecer la primavera está cerca, pues las hojas vuelan suavemente a su ritmo.
Mientras el escucha estático sigue a manos de magnificas canciones, el ambiente se pinta de “Ocres”, un pequeño viso de sol intenta enfrentársele a los temibles grises, a esas nebulosas que amenazantes ganan terreno con rapidez y en ocasiones ciegan la alegría. Momentos que ofrecen colores distintos, a manos de lo sonoro y las letras de cada línea.
Entrando al último tramo del Vertumno los pesares caen como ráfagas y el frio flagela los huesos, los lamentos se dilatan alrededor y sus causales merodean implacables, unos más próximos de otros. Este invierno se siente con más intensidad, es como “Marzo” entre los andes, con mucha lluvia, truenos, ríos caudalosos, bruma, campos inundados y barro, como Marzo con sonido delicioso que suministra algo de velocidad como para divertir y letras que más bien sugieren ponernos a recaudo, a defendernos de aquello que a veces trae vida aunque si la intensidad es excesiva podría ocasionas caos y desastre.
El punto final es “Solsticio”, se siente lastimero, unos acordes lentos dibujan un arcoíris con pequeños destellos como de cristales o corta vientos, simples como gotas irrumpiendo en el suelo, básicas como el parlamento de un desahuciado. De esa manera este invierno desalmando, encapsulado en 26 minutos va culminando, al mismo tiempo descubre y deja expuesta las heridas cicatrizadas y las aún por cerrar.
La lluvia seguirá inundando, seguirá ahogando el corazón, ocasionara conmociones pero dejara intacto esos detalles preciados y muchas veces traicioneros para nuestras emociones y nos devolverá la esencia de saber que no somos autómatas, que a veces nos dejamos llevar por los sentimientos –quizá nos equivoquemos- pero he ahí la diferencia, aprender a cada paso, asumir y reconocer las consecuencias de nuestros actos, tratar de hacerlo mejor. Tratar de entregar lo mejor…….
Y las hojas seguirán volando, tras el paso de las Estaciones………
FB/Estaciones
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