Venia masticando un gran texto, una especie de crónica con retazos reflexivos, pero la situación ya no lo amerita, las palabras que deslizaría serian en “valde”.
Así que técnicamente esto no es una estricta crónica, como los cánones los mandan. El show del pasado 28 valgan verdades fue uno de los mejores, reciento repleto, retraso en los horarios que cada vez son menores y que la gente ya ni percibe, un puñado de buenas visitas –Silverstein, For The Fallen Dreams y The Word Alive- y la cuota de las bandas locales.
Por mi parte estaba dubitativo si ir o no, -ya no tengo tantas facilidades como antes- Pero porfiando me acerque al local. Nuevamente en The Blood, un templo para el synthpop, wave y las corrientes obscuras de Lima la gris, quien lo diría que sería el escenario para que uno de los iconos emo/scremo se presentase, ¿será que la subcultura “under” de nuestra ciudad ya es más tolerable a las diferentes posturas? bueno pero ya en el show me datearon que The Blood se convierte en discoteca algunos días, como lo dije volvía a pisar el lugar después de años.
Ya en la puerta tuvimos algunos contratiempos a la hora del ingreso, lo presentíamos por ende las dudas, pasado unos minutos y gastando algunas bromas con el personal de seguridad que resguardaban la puerta –Seven, por cierto, buena onda los señores- nos concedieron el acceso, para entonces ya el show había arrancado, los encargados Tus Últimas Palabras. Apresurando un poco el paso y tras equivocarnos de entrada nos dirigimos a algún lugar cómodo para armar las herramientas para la batalla –la cámara, el lugar el baño-
Teniendo listo el armamento nos dispusimos a disparar y recoger las imágenes del set que quedaba de TUP, como siempre se les nota la entrega y los avances que su propuesta va teniendo.
La segunda banda llego, hablamos de Conflicto Urbano. Con un poco más de público en The Blood, el ambiente se calentó –también literalmente- iniciaron los ya acostumbrados mosh –para la crew- y la interacción banda público no era ajeno.
Para cerrar el segmento de bandas locales convocaron a los Inti Fall, una de las bandas con sonido propio dentro del circuito limeño, quizá por ello algo mediáticos y al parecer materia para la “mass media” limeña, esperemos que ese sea el inicio para el descubrimiento, que ese sector tiene grandes exponente. Como hablamos del manoseo mediático era evidente que tocaran el cover de un hit pop que los puso en el mapa, -para algunos medios-, la ejecución como en todas sus canciones fue de la mejor así que si tienen oportunidad vayan a alguno de sus show y saquen sus propias conclusiones.
Continuando el South Bound, se dio pase a los platos de fondo. For The Fallen Dreams se encargó del arranque, una banda que estaba dormida y despertó con mucha hambre al parecer, se plantaron en la tarima –sin mucha demora- y dejaron en claro que la potencia esta en ellos, mientras tanto la gente pidiendo “Bombay”. Detalle para cuidar, el vocalista sufrió una descarga eléctrica casi al cerrar su set, pero felizmente no llego a mayores y tampoco cambio la actitud de la banda.
Seguido, y por lo que este individuo fue muy ansioso, llego The Word Alive, quizá disminuido sin tecladista, ni baterista de aquel mítico “Empire”, pero aun demostrando que es –como dijo un amigo- una BANDASA, por algunos detalles su turno se retrasó un poco, y cuando llego la hora T. Smith mostro algo de lo que ofrece en el escenario, no llegaron los saltos mortales, ni nada, pero al menos se acercó al público que lo esperaba. Pero debo reconocer que me quede con las ganas de escuchar más de TWA. Lástima.
Ya era hora de que Silverstein hiciera cantar a los peruanos por segunda vez, minutos más minutos menos, publico más, publico menos, el 2017 ya quedaría registrado como una nueva fecha para aquellos que siguen a los canadienses. Con cervezas en la mano y tras dejar atrás el duro tramo de afinar su sonido iniciaron su set, unos minutos con canciones nuevas y las clásicas que son himnos de principios del nuevo milenio. La gente coreaba, el público chocaba manos con Shane de cuando en cuando y la emoción se desborda. El cierre perfecto fue escuchar a todo el público cantar a viva voz cuando Sr Told les dio la posta. Excelente.
Para cerrar y tratando de hacer memoria por ahí alguien dijo; “Que esta nueva camada de bandas buscan la unión de ese ambiente, así vendrían cosas mejores” quizá no sean la palabras exactas –porque mi memoria me traiciona- pero la consigna es esa, a fin de cuentas, unir fuerza para que más fechas como esta se den. Sinceramente deseamos que puedan llegar a cohesionarse todos dentro de. Esperemos que así se dé y no nazca un nuevo VXR –disculpen la sinceridad-
Antes de darle punto final, debo agradecer a la gente de 511 Underground (Tony) por las facilidades, a Wilson –te pasaste hermano mil gracias-, a los de Seven seguridad que no me “jodian” tanto. Y lamentar que muchos fans esperaban alguna muestra de afecto de sus estrellas, esperando al menos por una foto. Sera para la próxima.
Suerte a todos en lo que hagan y apoyen las nuevas fechas, tanto de bandas locales, de X o Y productor. Conmigo, con SPC, con nosotros hasta aquí. Muchas gracias
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